Asociación de Donantes de Sangre de Alcázar de San Juan
El acto de donar sangre es sencillo, rápido, prácticamente indoloro y controlado médicamente. Todo el proceso, desde la identificación del donante hasta que se marcha después de donar y recuperarse, no tiene por qué durar más de media hora.
El proceso de donación se realiza en plenas condiciones de seguridad para el donante, ya que el principal protagonista eres tú.
En este proceso intervienen varios profesionales que tienen como objetivo ofrecer una atención excelente a las personas que donan y asegurar de que la sangre donada sea correctamente tratada para destinarla a la transfusión de los pacientes que lo necesitan.
El primer paso es recoger los datos personales del donante para su registro, para lo que se requerirá su DNI, pasaporte o documento oficial equivalente para confirmar su identidad.
Si es la primera vez que dona, entonces se le remitirá a su dirección un carné de donante que podrá presentar en próximas donaciones. Si es un donante repetidor, bastará con identificarse para confirmar sus datos en el sistema.
El tratamiento de sus datos personales es absolutamente confidencial y tiene como finalidad gestionar su donación de sangre y, si lo desea, notificarle nuevas convocatorias para donar.
El personal médico o de enfermería te tomará la tensión arterial, te tomará el pulso y medirá los niveles de hemoglobina en una pequeña muestra de sangre extraída mediante una punción en uno de los dedos de la mano.
Si los niveles son adecuados, el médico le realizará algunas preguntas sobre su historial para garantizar que la donación es segura para usted y para el paciente que va a recibir su sangre.
Tanto el reconocimiento como el cuestionario tienen como fin identificar y descartar a las personas cuya donación pueda suponer un riesgo para su salud o para la salud del receptor de la transfusión.
Si el donante está en condiciones de donar, pasará a tumbarse en una camilla mientras el personal de enfermería prepara el material de extracción estéril y de un solo uso.
La donación durará entre 5 y 10 minutos y el volumen extraído será de aproximadamente 450 ml de sangre. Esta sangre recogida pasa a un sistema cerrado de bolsas que contienen líquido anticoagulante y conservantes.
Al terminar, el donante espera recostado un par de minutos hasta que el personal de enfermería que le atiende verifica que está en perfecto estado.
Después de la extracción ya solo queda reposar unos minutos para recuperarse tomando un pequeño refrigerio compuesto de una bebida y algún alimento ligero para reponer fuerzas antes de reanudar la actividad normal.
El volumen de sangre extraído se recupera a las dos horas y es importante beber mucho líquido durante las 24 horas siguientes a la donación de sangre, especialmente en verano.
Al cabo de unos días recibirás los resultados analíticos. Además, si donas por primera vez recibirás en tu domicilio el carnet de donante de sangre.
